El 2021 es un mal espejo al que mirarse en términos de producción legislativa. Se aprobaron entonces 18 leyes, una cifra que no se alcanzaba desde el 2008. El récord obedeció a los seis meses que el Parlamento permaneció disuelto por la pandemia y la celebración de las elecciones autonómicas en el 2020, lo que obligó a los diputados del Hórreo a apurar trámites al año siguiente para dar luz verde a las normativas pendientes. Desde que Alfonso Rueda es presidente —fue investido en mayo del año pasado— la Cámara aprobó cinco, dos de ellas relacionadas con el empleo público para adaptarse a la legislación estatal, además de los Presupostos y sus leyes de acompañamiento. El ritmo volverá a acelerarse este año, con al menos diez regulaciones que entrarán en el Parlamento para su debate y votación antes de finalizar la legislatura a mediados del 2024.
En primavera se discutirá en pleno la Lei do Xogo para su aprobación después de años de tramitación y casi 40 sin actualizar la normativa vigente. Entró en la Cámara a principios de noviembre, por lo que se debate desde entonces en comisión para «alcanzar o maior consenso posible», explican fuentes de la Xunta, que atribuyen a ello la espera para su votación. El texto encontró el rechazo de PSdeG y BNG desde el primer día, presentando enmiendas a la totalidad para su devolución. El PP hizo valer su mayoría absoluta para que prosperase la tramitación de una ley que limita el número de locales y máquinas de juego y fija una distancia mínima entre los nuevos establecimientos y los centros de enseñanza y de rehabilitación. Leer la noticia completa lavozdegalicia